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Nadar a mariposa

Cómo nadar a mariposa – Las mejores técnicas

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El estilo mariposa es uno de los más complicados de dominar en natación pero puede resultar muy beneficioso para la salud. Por eso, en Décimas te enseñamos cómo nadar a mariposa para que puedas disfrutar de todas sus ventajas. ¡Descubre con nuestros consejos cuáles son las mejores técnicas!

Beneficios de nadar a mariposa

Nadar a mariposa puede ayudarte a mejorar tu fuerza y tu resistencia y también es un estilo muy elegante y de movimientos muy poderosos. Pero también puede resultar muy saludable. ¿Cuáles son los beneficios del estilo mariposa?

  • Ayuda a fortalecer los músculos, sobre todo los de los brazos, los hombros, el pecho, la espalda y el abdomen, que son los implicados en sus movimientos.
  • Mejora la resistencia cardiovascular, ya que exige un gran esfuerzo continuado que también implica una mayor demanda de oxígeno de nuestro cuerpo. Esto ayuda a aumentar la capacidad pulmonar y fortalece el sistema cardiovascular.
  • Permite quemar calorías, lo que significa que también ayuda a bajar de peso si se realiza el ejercicio con intensidad.
  • Aumenta la flexibilidad, sobre todo en lo que se refiere a hombros, espalda y cadera. Esto es importante para prevenir lesiones y mejorar el rendimiento en otros deportes.
  • Mejora la coordinación, ya que requiere de movimientos fluidos y coordinados de piernas y brazos.
  • Ayuda a trabajar el core, pues el abdomen y la parte baja de la espalda son zonas clave para practicar este estilo de natación correctamente, ya que mantener una buena postura y tener estabilidad en el agua es fundamental. Por tanto, tendremos nuestros músculos del core más tonificados.

Cómo nadar estilo mariposa: consejos y claves

El estilo mariposa es muy exigente y cuesta dominarlo al principio. Para ayudarte a conseguirlo, aquí tienes algunos consejos sobre cómo nadar a mariposa correctamente:

  1. Domina la técnica básica. ¿Cómo nadar estilo mariposa? Debes realizar un movimiento simultáneo y simétrico de los dos brazos sobre el agua, seguido de un movimiento ondulante del cuerpo y un golpe coordinado de las piernas (que se conoce como ‘patada de delfín’).
  2. Controla la respiración y el ritmo. ¿Cómo nadar mariposa sin cansarse? Es una de las grandes complicaciones de este estilo de natación. Tienes que sincronizar tu respiración con el movimiento de tus brazos. Por lo general, se respira cada dos o tres brazadas. También debes mantener un ritmo constante y no retener la respiración para evitar la fatiga.
  3. Haz ejercicios de fuerza y flexibilidad. Fortalece tu tren superior y trabaja la flexibilidad de tu columna vertebral y de tus caderas. Haz ejercicios específicos fuera de la piscina para trabajar estos aspectos y eso te ayudará a nadar a mariposa.
  4. Domina la patada de delfín. ¿Cómo nadar mariposa más rápido? Aprender esto es fundamental para dominar la técnica. El movimiento empieza en la cadera y fluye hasta los pies. Para hacerlo bien, es recomendable practicarlo por separado para mejorar la fuerza y la coordinación que se necesitan para hacer este movimiento correctamente.
  5. Practica la sincronización. Debes sincronizar el movimiento de tus brazos con la patada de delfín. Los brazos y las piernas deben realizar a la vez un movimiento fluido y coordinado para maximizar la velocidad y la eficiencia al nadar.

Todo esto te costará al principio pero no debes desanimarte porque es cuestión de tiempo y de práctica que domines el estilo mariposa. ¿Qué no debes hacer?

  • En la recuperación, no pongas las palmas de las manos hacia abajo ni dobles los codos. Los brazos deben estar extendidos al salir del agua y con las palmas mirando hacia atrás.
  • No tardes demasiado tiempo en salir a respirar porque eso hará que, cada vez que respires, saques demasiado tiempo la cabeza del agua y te frenes. Tras respirar, además, la cabeza es lo primero que regresa al agua, antes que los brazos.
  • Al realizar la patada de delfín, no dobles demasiado las rodillas. Recuerda que el movimiento parte de las caderas y es fluido hasta llegar a los pies, manteniendo la línea de tu cuerpo.

Si eres capaz de aplicar la teoría sobre cómo nadar a mariposa, ¡llevarlo a la práctica te resultará mucho más fácil!

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