Consejos para ir al gimnasio con mascarilla

Cuando termina septiembre y el buen tiempo da paso a días más fríos, es el momento que muchos se fijan para volver al gimnasio. En este año atípico, los deportistas están aprovechando al máximo para entrenar al aire libre, pero los asiduos al gym están deseando volver a entrar en contacto con las máquinas de ejercicio y no pueden retrasarlo más.

Utilizar mascarilla para ir al gimnasio es ya obligatorio en algunas comunidades como Galicia o Madrid, mientras que en el resto es altamente recomendable. Para volver a la rutina de la forma más segura posible, se deben seguir algunos consejos básicos que aseguren el uso correcto de este nuevo complemento que nos acompañará aún durante un tiempo.

Elegir la mascarilla adecuada

Escoger la mascarilla más adecuada para hacer deporte es fundamental. Al igual que las zapatillas de running son diferentes de las que utilizamos para jugar al tenis, la mascarilla que se utiliza en el día a día puede no ser la más adecuada para ir al gimnasio.

Las mascarillas de tela lavable homologadas son la mejor opción para hacer ejercicio, ya que el aumento en la frecuencia respiratoria puede estropear en exceso el tejido de las FFP y las quirúrgicas no están preparadas para soportar un alto número de exhalaciones durante mucho tiempo.

Manipular la mascarilla con precaución

Lo más aconsejable es ponerse la mascarilla y no retirarla hasta volver a casa. De todos modos, si es necesario quitársela por algún motivo, se debe hacer con precaución:

• Lavarse las manos con agua y jabón (o gel hidroalcohólico) antes de tocarla.
• Retirarla sin tocar la parte delantera, se debe agarrar por las gomas y tirar hacia delante.
• Guardarla inmediatamente en un lugar aislado y libre de gérmenes, como una caja porta mascarilla.
• Colocarla de nuevo con las manos limpias y cubriendo tanto la boca como la nariz.

Realizar un proceso de adaptación

La mascarilla impide respirar de forma normal, por lo tanto, antes de empezar a entrenar es necesario comprobar cómo afecta a cada deportista para adaptar el nivel de exigencia a esta nueva normalidad.

La mejor opción es comenzar con ejercicios suaves e ir aumentando el ritmo poco a poco. En unas semanas el cuerpo se habrá acostumbrado y se podrá volver a la actividad habitual sin apenas notar la mascarilla.

Descansar después de un uso prolongado de la mascarilla

Un uso continuado de la mascarilla puede provocar sarpullidos, irritación de la piel o, en casos extremos, generar hongos o dificultades para respirar. Por este motivo, después de practicar deporte con la mascarilla puesta, se debe descansar retirándola siempre y cuando se puedan cumplir las distancias de seguridad.

Tras una hora de ejercicio, es aconsejable pasar unos 10 minutos con el rostro descubierto. Si el tiempo con la mascarilla aumenta, deberá ser mayor el descanso, llegando a los 60 minutos si han pasado varias horas.

Equipo Décimas

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